Bienvenido a una nueva forma de pensar distinto

Sólo hay dos cosas infinitas, el Universo y la estupidez Humana, pero no estoy muy seguro de la primera, de la segunda puedes observar como nos destruimos solo por demostrar quien puede mas.
Albert Einstein

martes, 25 de mayo de 2010

El Gobierno Real Vs. El Gobierno Paralelo

Ver y escuchar al Presidente Chávez en cada una de sus alocuciones televisivas, se ha convertido, prácticamente en una necesidad comunicacional sin precedente alguno. La pauta noticiosa e informativa de cada día, tanto en la prensa escrita como en la audio-visual, es dictada por el presidente, como nunca otro Jefe de Estado lo había hecho.

Las apariciones en el canal del estado, dando parte sobre las actividades políticas que se realizan a diario en el país, ya sea por comisiones o equipos de trabajos de carácter nacional e internacional, han hecho del Presidente Chávez, un líder político con características indiscutibles.

Sus afirmaciones y aciertos en la política nacional (en lo económico, en lo social y en lo militar) han hecho del presidente un estadista con visión y proyecciones desarrollistas, capaz de hacer de Venezuela (tal como él lo ha afirmado) una "potencia regional".

Ahora bien, existen intervenciones del presidente, donde se ha dejado escapar ciertas deficiencias (comentadas por él) detectadas en todos los entes administrativos del Gobierno.

Casos tales como: la solicitud de viviendas, la solicitud de apoyo en materia de salud, solicitud de empleos, solicitud de becas, solicitud de créditos, retardos en la tramitación de documentos; son algunos de los hechos que son comentados por el presidente cada vez que lee su twitter @chavezcandanga al público en general.

Estos hechos, analizados en una "perspectiva" de país en vía de desarrollo, resultarían aceptable sino fuera por el caudal de ingresos proveniente de la renta petrolera. Pero, el ingreso petrolero, aún se sigue quedando corto, cuando se analizan ciertos escenarios asociados al manejo administrativo gubernamental; tales escenarios yo lo he denominado el "Gobierno Paralelo".

Así como en la planificación estratégica militar, existe un teatro de operaciones "reales" y un teatro de operaciones "paralelo", donde en éste último, se diseñan los aspectos del área de inteligencia y búsqueda de la información a través de acciones ocultas o encubiertas de uso poco convencional con el objeto de lograr un daño no previsto al enemigo; pareciera, que en el Gobierno del Presidente Chávez, existiera un grupo del propio gobierno interesado en que las tareas del "Gobierno Real" no se cumplan ni se ejecuten.

En ese "Gobierno Paralelo", que funciona a la par del "Gobierno Real", al parecer, se encuentran incrustados un número considerado de personas, trabajando en función de que las cosas simplemente "NO FUNCIONEN".

Los diferentes entes administrativos del Estado, vienen presentando una serie de decadencias que no se solucionan con el simple cambio del ministro de turno.

Escuchar al presidente decir: "Voy a crear un premio llamado el morrocoy". Haciendo una clara alusión a los planes y proyectos que no se cumplen en el tiempo establecido ó que simplemente no han dado inicio a la actividad, tal cual como fue prevista según lo planificado.

Todo esto demuestra el grado de incapacidad de las personas responsables de hacer cumplir las políticas públicas establecidas por el Gobierno Nacional. Lamentándolo mucho, esas personas siguen rodeando al presidente.

Sólo el mecanismo del "twitter @chávezcandanga" le permitió al Presidente Chávez detectar que su administración aún adolece de grandes males que lo han imposibilitado avanzar después de once años de revolución.

Lamento que el Presidente Chávez, no haya escuchado las recomendaciones dadas por el Sr. Mario Silva, en su Programa La Hojilla, cuando le comentaba sobre el "poder" del twitter @chavezcandanga. Esperemos que el presidente rectifique a tiempo. Porque nuevamente sus asesores, que no son más que unos "des-asesores", lo han llevado a tomar una decisión que los beneficia más que todo a ellos, es decir, al "Gobierno Paralelo".

Crear el nuevo dispositivo de contacto con el pueblo, es decir, la página "www.chavez.org.ve", no es del todo una mala idea. Sólo que se pierde el contacto en tiempo real con un pueblo que espera mucho de su presidente. Sobre todo cuando siente que el Estado burocrático aún sigue presente.

Mientras más hagan que el presidente sepa menos de lo que ocurre en la administración del Estado burocrático en que no ha podido salir Venezuela, más se afianzará el "Gobierno Paralelo" sobre el "Gobierno Real".

Esa lucha, de la revolución dentro de la revolución, tarde o temprano se presentará. La furia del ciudadano en la búsqueda de un genuino cambio que le permita el logro de satisfacer las necesidades que sólo un "Gobierno Real" debería de conceder, se verá materializada cuando definitivamente sean execrados todas aquellas personas que no terminan por entender que el cambio de paradigmas del nuevo orden social se está edificando.

Este país, gracias al Presidente Chávez, apuntala la determinación del cambio social en lo nacional y regional, sin dejar de pensar en lo mundial o planetario.

Presidente, aún falta mucho por hacer, pero no permita que su Gobierno, que trabaja sobre una base de hacer realidades los sueños de esta nación, sea sobrepasada por el oscurantismo de un grupo de personas (que estando en el poder) pretenden menoscabar los ideales de progreso que todos nos merecemos.

Lic. Carlos Salazar.

lunes, 24 de mayo de 2010

Chávez Vs. La corrupción y el Estado burocrático

Es interesante haber escuchado la intervención del Presidente Hugo Chávez Frías, durante la Juramentación de la Nueva Directiva de la Corporación Venezolana de Guayana (CVG) cuando hace mención, a la "lucha contra la corrupción" e invita al colectivo a "denunciar a los gerentes que sólo se ponen la gorra y la franela roja rojita cuando les conviene".

¿Será que el Presidente está abriendo los ojos?
¿Constituye ésta intervención una posición que se presenta nada más para las Empresas del Sector Minero en Guayana?
¿Donde quedan los demás sectores, en donde la corrupción está presente en todas sus formas y en todos sus ámbitos?

Haber escuchado esas palabras por parte del Presidente realmente no es nuevo. Lo nuevo es el énfasis que le dió a cada frase y al llamado a acabar de una vez por toda con el germen de la corrupcción.

Ahora bien, todo ésto puede generar una serie de preguntas en los demás sectores, que al igual que la CVG, adolecen del mal de la "CORRUPCION" y de los gerentes disfrazados de rojo rojito.

No es necesario señalar (en éstas líneas) cuales son esos sectores y quienes podrían ser esos gerentes. Sólo basta ver las denuncias que son registradas a diario en ésta página web denominada Aporrea.org y que con mucha amabilidad publican, como parte del cambio informativo que dentro de ésta revolución tiene que darse.

El Presidente Chávez, en ocasiones se comporta como el conocedor de lo que ésta ocurriendo en ciertos niveles, en lo concerniente a la corrupción, y hace el llamado a denunciar.
No obstante, Sr. Presidente, le hago una solicitud: "dado que Usted personalmente pide que los obreros y trabajadores denuncien la corrupción, el Ejecutivo Nacional debería garantizar que aquellos trabajadores denunciantes no terminen siendo despedidos. No por el hecho de perder el empleo, porque estoy seguro que muchos trabajadores honestos resteados con este proceso revolucionario estarían dispuestos a correr ese riesgo si eso garantizara que se va a corregir el vicio; sino porque sabemos que el despido de un trabajador que hace una denuncia es un paso atrás para el proceso revolucionario, porque el mayor riesgo de esta revolución es la corrupción que se esconde detrás del Estado burocrático".

Si bien es cierto, la revolución heredó ese Estado burocrático, pero, ¿cómo podemos quebrar a ese Estado burocrático si quienes actúan desde dentro del mismo para corregir los vicios son expulsados?

Que un trabjador denunciante salga despedido es una pérdida para la revolución y un paso atrás en la lucha contra la corrupción, por eso, parte del apoyo que el Ejecutivo Nacional debe dar a los trabajadores es una instancia, un espacio de cruce de información de modo que el Presidente y su equipo puedan verificar que el trabajador que hace una denuncia con pruebas y argumentos no termine despedido; es un derecho mínimo que debe tener cada trabajador porque estamos conscientes de que ese Estado burocrático tiene mecanismos muy "sutiles" de silenciar a quien ose cuestionarlo. Se trata entonces de que el Presidente no sólo pida la denuncia, sino que facilite las previsiones para la protección del denunciante.

El colectivo en general (sobre todo el colectivo del PSUV) confiamos en el Presidente Chávez. De hecho es el Líder de ésta revolución. Pero a veces nos hacemos preguntas, cada vez que nos enteramos de hechos descarados y de acciones que atentan contra la moral y los valores. Organizaciones como PDVSA, CANTV, CORPOELEC, METRO DE CARACAS, Alcaldías, Gobernaciones, Ministerios, Asamblea Nacional, sin dejar de nombrar a las Fuerzas Armadas. Todas ellas y otras tantas más, no escapan de ser denunciadas a través de diferentes medios públicos y privados.

Ya no basta la denuncia en un medio de comunicación. El uso del correo electrónico, mensajes de texto, el Facebook y ahora el Twitter, constituyen las nuevas formas y medios de denuncias.

Claramente se demuestra que hay un germen de inconformidad que "puja" para que los cambios sigan dándose, prueba de ello han sido las elecciones internas del PSUV, para las candidaturas a Diputados de la Asamblea Nacional. De un universo de más de 100 diputados que se postularon para continuar en un segundo período, sólo 18 de ellos recibió el apoyo de las bases del Partido. Ese resultado tiene una lectura muy clara. El que tenga ojos que vea. El que tenga oídos que oiga.

El colectivo del partido PSUV, que representa a una gran mayoría de éste pueblo, ya está hablando. Su participación y acción ha sido muy clara y sabe lo que quiere.

Ahora bien, Señor Presidente, este análisis puediera tener también multiplicidad de interpretaciones y objeciones. Quizás las argumentaciones de algunos lectores difieran del articulo. Pero no hay que negar que estamos en presencia de un cambio dentro de ésta revolución.

Un cambio, que a la velocidad en que se está presentando, es absolutamente visible. Así como lo es, el cúmulo de denuncias y exigencias que cada día aumenta. Sólo hay que ver el twitter del Presidente: @chavezcandanga.

La lucha contra la corrupción y el Estado burocrático no es fácil. Así como tambien, no es fácil destruir los hilos del poder que se han tejido dentro de todas las instancias organizacionales de la administración pública. Tejidos que ya son descomunales. Que se encuentran ocultas. Disfrazadas dentro del sistema. Y que no han hecho más que enfermar al Estado.

Sin embargo, no podemos desperdiciar esta oportunidad que nos ha dado la revolución de generar cambios. La tesis de un sistema que no termina de morir y un sistema que no termina de nacer está presente. Sólo convirtiéndonos en parteros verdaderos nos estamos asegurando la aparición del nuevo sistema, del nuevo Estado.

Lic. Carlos Salazar

sábado, 22 de mayo de 2010

No es conspiración, es justicia.


La semana pasada culminaba un artículo dirigido al Dr. José Vicente Rangel con la siguiente frase:

¿No hay descontento militar, quién puede negar esto?.....

En esa oportunidad, le escribía al Dr. Rangel, sobre las injusticias que se están cometiendo con los ascensos de ciertos oficiales y que el Alto Mando Militar ha preferido de la mejor manera (según una norma de la "nueva" LOFAN) para aquellos oficiales que no se les concederá el ascenso respectivo, darles de baja de la institución militar de forma inmediata.

Al leer la norma, prevista en el Artículo Nro. 92 de la "nueva" LOFAN, señalada como "Permanencia Máxima en el Grado o Jerarquía", la misma indica lo siguiente:

"Cumplido el tiempo de servicio mínimo en cada grado o jerarquía, el militar profesional que no sea ascendido al grado o jerarquía inmediata superior, podrá permanecer en el mismo por un lapso de dos años. Cumplido éste lapso y no obtenidos los méritos o no existir la vacante para ascender, pasara a la situación de retiro".

Claramente se observa en la norma, que existen cinco grandes interrogantes a disipar, las cuales son:
  • ¿Quién determina los méritos de un militar profesional, cuando a él mismo, durante dos años consecutivos no se le ha concedido el ascenso al grado inmediato superior, a pesar de no habérsele computado ninguna falta en su historial personal?
  • Para un militar profesional, que no haya sido ascendido por falta de plaza o vacante en el grado inmediato superior y que se le conceda la baja a los dos (02) años de haberse cumplido el lapso de ascenso (a pesar de que el militar tenga todas las condiciones para merecerlo). ¿Acaso éste acto no constituye una acción de injusticia y viola todos los derechos del militar como ser humano?
  • ¿Dónde está la tranquilidad psicológica del profesional militar?
  • ¿Acaso esta norma no puede ser usada como motivo para flaquear la moral y la buena conducta de oficiales apegados al principio universal "de la obediencia debida"?
  • ¿Qué otras "condiciones" y "capacidades", debería tener un militar profesional aparte de las que constituyen (en el buen sentido de la palabra) la obediencia, la disciplina, el cumplimiento de órdenes, el cumplimiento de su trabajo; para que sean tomadas como "méritos" a la hora de un ascenso?
Estas y un buen número de otras preguntas, que cualquier persona pudiera plantearse, constituyen el paradigma de esta nueva norma, que más que beneficiar al conglomerado militar profesional, lo colocan en una situación semejante al famoso lema "SÁLVESE QUIEN PUEDA".

¿Y quiénes serían los más capaces de "salvarse" del inquisidor del momento; del "quién" decide si vas o no vas "pa' el baile"?

¿En qué situación están poniendo a los oficiales de las Fuerzas Armadas Nacionales?

¿Qué se persigue en el fondo con esta norma? ¿Acaso pretenden una guerra de cuchillos entre oficiales o un estado de jalabolismo de subalternos hacia los superiores?

¿Acaso persiguen la idea, de que los oficiales honestos "NO DENUNCIEN A OFICIALES CORRUPTOS", que los hay en todos los grados y en todas las fuerzas?

Para nadie es un secreto, que aquel militar que ose denunciar actos deshonestos dentro de la oficialidad, se le execre y se le aparte como si fuera un leproso, un enfermo; o más triste..... un pobre "huevón".

Los oficiales de hoy no son como los oficiales de ayer, en relación a su nacionalismo y su ética militar. El profesionalismo, la integridad y la capacidad técnica hoy estan más presentes. Valores que están por encima de cualquier pretensión de dominación mental y de subyugamiento.

La pretendida intención de esta norma que escapa de todo sentido de benignidad se verá enfrentada en el tiempo y no podrá sostenerse ante el cúmulo de ideas progresistas que se replantean en la filosofía militar venezolana.

Somos nosotros, los militares activos y en situación de retiro, de manera concienzuda y con conciencia progresista, enfocados a los nuevos tiempos y a los dictados de éste nuevo siglo, los llamados a realizar los verdaderos cambios que engendren una generación de oficiales capaces de consolidar unas Fuerzas Armadas que apuntalen los designios que necesita nuestra nación.

Sólo con ideas y pensamientos honestos, con acciones correctamente enfocadas, sin temores y con capacidad de decisión, se podrá efectuar un cambio que permita el desarrollo verdadero de la organización militar.

Por tanto, el decir con firmeza frases como: No a la corrupción descarada. No a la subordinación pasiva. No al cumplimiento de órdenes arbitrarias. No a la obediencia ciega. No a la indisciplina disfrazada de disciplina. No a las normas con pretensiones de subyugamiento...constituyen los primeros pasos hacia un cambio de paradigma y el replanteamiento de la nueva filosofía militar venezolana.

Lic. Carlos Salazar

Carta abierta al Dr. José Vicente Rangel


Estimado Dr. José Vicente Rangel:

Por primera vez, ocupo un tiempo de mi vida para escribirle a Usted.

Quiero que sepa, que en la medida de las posibilidades, no dejo de ver su programa televisivo de los días domingos.

Mi ánimo de escribirle, obedece a los CONFIDENCIALES del pasado domingo, cuando hace mención a los planes existentes de asesinar al Sr. Presidente Hugo Chávez Frías.

Eso, con sólo imaginármelo que pudiera suceder en la humanidad del Sr. Presidente, me preocupa y me llena de terror. Primero, como venezolano y segundo, como un militar retirado desde hace 11 años.

Escuchar en su programa la existencia de esos planes malvados y con consecuencias impensables, por parte de un sector, que se niega a reconocer al sistema democráticamente formado durante años, no es nada fácil.

Pero, deberíamos hacernos ciertas preguntas, del por qué la insistencia de ese tipo de noticias.

He leído el "Blog La Protesta Militar" en varias oportunidades. En lo personal, lo considero algo de pésima calidad. Sin razonamiento alguno. Sin pensamiento político definido. Lo considero más bien una forma de publicidad, por parte de una persona con interés de tratar de mantener una imagen pública de persona "arrecha con el gobierno" y de bajo nivel intelectual.

Por lo tanto y con mucho respeto le informo: considero que ha sido un error, la publicidad dada por Usted a ese "blog", cuando le dedica un espacio de tiempo en su programa del pasado domingo 09 de mayo.

En cambio, existen otras cosas que vienen ocurriendo dentro de las FAN y que Usted al parecer no lo ha notado, o simplemente, aún no ha sido informado debidamente.

Me refiero a la injusticia que se viene cometiendo con ciertos oficiales que durante años no se les ha permitido ascender.

No por culpa de Chávez, porque sé que el Sr. Presidente es una persona llena de mucho humanismo; sino, por culpa de ciertos oficiales del Alto Mando Militar que se han arrogado el derecho exclusivo de no permitir el sano desarrollo de los ascensos, tal cual, como lo estipulan las normas, tanto de disciplina militar como de justicia militar; creando un malestar dentro de la institución con la intención de hacer ver al Presidente como el único responsable.


Nosotros los militares somos formados con un alto pensamiento democrático. Que existan excepciones, por supuesto que los hay; no lo niego. Pero no son todos, mi estimado Dr. José Vicente Rangel.

Y es precisamente eso, lo que me molesta. Estar afuera de las Fuerzas Armadas es lo que me ha permitido observar el todo con mayor claridad.


Sé que el Sr. Presidente, ha hecho alusión de conocer muy bien el seno de las Fuerzas Armadas. Pero creo, que se está quedando corto. Porque no se trata nada más de un aumento en salario y en beneficios sociales y económicos.

Se trata del individuo, de la persona, del militar formado en la escuela, en la academia, del profesional, del militar con estudio, con intelecto, con pensamiento, con ideas.

Se trata del militar que se ha formado un sueño. El militar que se ha proyectado en el futuro a corto, mediano y largo plazo. Y que de repente, por caprichos procedimentales; por motivos de venganza; de pase de factura; por no estar conforme con algo que hace daño al colectivo; por verse inculpado en algo que nunca cometió y una vez declarada su inocencia aún lo mantienen en una lista de no ascenso de manera perenne. Una lista plastificada y pegada al escritorio de algún generalucho.

De ese descontento, es al que me refiero. Lo escribo con conocimiento de causa. Vivido y contemplado en lo más cercano de mi humanidad.

He visto con mucha preocupación las recientes bajas de un número considerado de oficiales de todas las fuerzas; muchas de ellas, efectuadas violando toda normativa de legalidad.

Ahora, nuevamente están próximas de ser ejecutadas otras tantas más.

Me pregunto, Dr. José Vicente Rangel:

¿Acaso el Sr. Presidente, no se ha dado cuenta, que le están dando de baja a muchos oficiales sin que se les permita algún tipo de apelación sobre semejante decisión?

¿Usted cree firmemente, que los historiales de esos oficiales han sido estudiados con toda la equidad que un proceso como éste debería tener?

¿Se ha dado cuenta el Sr. Presidente, del daño moral que le está ocasionando a la institución militar y por ente la creación de un gran malestar, casi generalizado?

¿Dónde está el humanismo que tanto dice predicar el Sr. Presidente?

¿Le dirán a la opinión pública que sólo es un proceso rutinario y que la misma está regida por la normativa legal vigente? ¿Será que la opinión pública lo creerá del todo?

Por favor, Dr. Rangel. Me considero un ciudadano que en una oportunidad fui militar; y que fue dado de baja de manera injusta hace once (11) años; por el sólo motivo de denunciar actos de corrupción dentro de la FAN, siendo acusado de violar el órgano regular y perdiendo mi carrera de manera humillante. Viendo como se salían con la suya los señores de los soles y de las estrellas doradas.

Nunca se me permitió defenderme y mucho menos pude acudir a alguien que me ayudara a efectuar una defensa en contra de la injusticia que se estaba cometiendo en mi persona.


Hoy en día, cuando han transcurrido tantos años, nuevamente he tenido en mis recuerdos la sensación de la injusticia; y que sé, en lo más profundo de mi ser, cómo muchos de esos oficiales, se deben estar sintiendo.

La traición y suciedad que se está ejecutando, dentro de una institución que vio formar a esos oficiales y que les permitió crecer profesionalmente; pero que a la vez, los despide, sin poder acudir a nadie. Porque simplemente... ya no hay nadie.

Con tristeza y con dolor, veo como una institución se adueña de manera descarada del futuro de cientos de familia. Familias que en la distancia, acompañaron a esos oficiales cuando prestaban sus servicios para la nación, para la patria. Pero que ya, esa institución sin reparo alguno, decide quien se queda y quien se va.

Y ahora, serán dados de bajas sin remordimiento alguno por parte de sus inquisidores.

Por lo tanto, porqué no preguntarnos:

¿No hay descontento militar, quién niega eso?

"Una institución no evoluciona, cuando sus integrantes no están del todo conforme con las decisiones que se toman en el presente; porque sus integrantes saben muy bien, que en el futuro cercano, esas decisiones pudieran afectarlos a todos por igual".

Lic. Carlos Salazar.